Contensivo - obsesivo (sobre esas cosas que no pueden decirse)
Mira, hay tres cosas puntuales que tengo que decirte. La primera es una decisión, y si entre la cantidad de pasos impares que tengo que hacer para acercarme a ti debo dar el primer paso, lo haré. Porque ya me canse de esperar y esperar a que todas tus mañas de fina coquetería sigan jugando a caminar como caracol, avanzando dos pasos por la noche y cayendo tres en la mañana.
Lo segundo es un reclamo, ¿cómo después de pasarla tan bien terminamos tan mal? ¿como me dices que valgo tanto la pena como para no meterse conmigo? es una especie de juego donde la contradicción es una gran verdad que crea telarañas y no nos deja mover.
Lo tercero es una pregunta, anata wa aishitemaska. have you change your mind ?
y por más que me obsesione tu respuesta sé
que el silencio es tu mejor opción
para una escapada
el martes por la noche.